Pronunciamientos

Sobre el cierre de la revista Cambio como medio de actualidad y política

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jueves, 11 febrero 2010

Sobre el cierre de la revista Cambio como medio de actualidad y política

No obstante, Rodrigo Pardo, director de la publicación, y María Elvira Samper, editora general, manifestaron que la decisión se debió a la línea editorial de la revista, pues en ella se realizaban fuertes denuncias de corrupción, las cuales, en varias ocasiones habían afectado a funcionarios del gobierno. 

En diálogo con la FLIP, María Elvira Samper aseguró que no tiene “ninguna duda” de que la decisión se tomó por la línea editorial de la revista. Señaló que sabe de “fuentes confiables”, cercanas a la junta directiva de la CEET, que Cambio no era del agrado de los directivos de dicho conglomerado de medios por su postura crítica. 

“Eso era evidente, bastaba con leer las columnas de José Obdulio Gaviria (ex asesor presidencial y persona cercana al Grupo Planeta) en las que nos atacaba. Además, constantemente recibíamos ‘mensajes subliminales’ respecto a los temas que manejábamos”. Los “mensajes subliminares” a los que se refiere eran llamadas que recibían Samper o Pardo por parte de personas de la junta directiva de la CEET en las que le ‘sugerían’ no tocar ciertos temas, resaltó la Editora.

Samper recordó que el pasado mes de diciembre el ex ministro de Defensa y socio minoritario de la CEET, Juan Manuel Santos, había señalado recientemente a los periodistas de la revista Cambio como “idiotas útiles”. La declaración del ex Ministro se dio luego de que Cambio publicó un resumen del informe de la Corporación Nuevo Arco Iris, el cual cuestiona los alcances recientes de la política de ‘Seguridad democrática’ del gobierno. 

Samper aseguró que no cree en el argumento de los problemas financieros porque la revista sí había producido utilidades en el último año, contrario a otros medios de esa casa editorial que han generado pérdidas y que no han sido cerrados. Según la Editora, los directivos de Cambio habían presentado al CEET una propuesta de ajustes para la revista basada en un estudio de nicho que buscaba mejorar los ingresos, pero nunca se dio “al menos un debate” sobre la propuesta. 

Por otro lado, el miércoles 3 de febrero cuando se conoció el comunicado de la CEET, la casa editorial le notificó a Samper y Pardo que la revista culminaría labores a finales de febrero, por lo cual se debían realizar tres ediciones más. Sin embargo, Samper informó a la FLIP que el martes 8 de febrero en la tarde, los directivos de la CEET cambiaron su decisión y anunciaron que la revista iba hasta esta semana y no circularía la edición que iba a salir el próximo jueves 11 de febrero. Según Samper, esta nueva decisión se debió a que el siguiente número de Cambio iba a estar dedicado al cierre de la revista y tendría varios artículos en los que trataban de evidenciar que había sido una decisión fundamentada en los contenidos periodísitcos. Esto había sido anunciado por ella y Pardo en el consejo de redacción de ese mismo día en la mañana. 

Finalmente, la decisión se produce en el marco del proceso de adjudicación que el gobierno hace para el futuro tercer canal privado de televisión en Colombia, en el cual el Grupo Planeta se encuentra interesado como única empresa en concurso. Según algunos medios de comunicación, la decisión podría interpretarse como un intento de Planeta por congraciarse con el gobierno para acceder a la licencia del canal. 

Sobre el particular la FLIP manifiesta:

- La Fundación para la Libertad de Prensa entiende la difícil situación económica por la que atraviesan los medios de comunicación impresos y las necesidades que tienen de hacer ajustes en ellos. 

- A su vez, reconoce y defiende la autonomía que tienen los conglomerados de medios de comunicación de seleccionar sus publicaciones, cerrarlas o abrir nuevas, así como despedir directivos, periodistas, columnistas o colaboradores, en los términos que lo contempla la ley. Este derecho está igualmente protegido por la libertad de expresión y el derecho al acceso a la información que tienen los ciudadanos. 

- No obstante, la FLIP manifiesta su preocupación por el hecho de que estas decisiones puedan tener como propósito silenciar investigaciones, denuncias y perspectivas críticas. 

- Resultaría más grave aún, que la revista Cambio haya sido cerrada por los contenidos periodísticos que emitía y que, como lo denuncian sus directivos, se haya impedido la próxima edición por los temas que iban a ser publicados. 

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jueves, 11 febrero 2010

Sobre el cierre de la revista Cambio como medio de actualidad y política

El pasado 3 de febrero de 2010 la Casa Editorial El Tiempo (CEET) anunció a través de un comunicado que su revista Cambio, publicación nacional semanal sobre actualidad nacional y política, se convertirá en una revista mensual de variedades argumentando problemas financieros. Sus directores, que fueron despedidos, denuncian que los reales motivos del cierre estuvieron relacionados con su línea editorial. 

En su comunicado la CEET, cuyo mayor accionista es el Grupo Planeta de España, manifestó que el cambio en la publicación se debió a que “el declive mundial de las revistas de actualidad y política derivado de un cambio en los hábitos de los lectores y, como consecuencia de ello, el viraje en las decisiones de inversión de los anunciantes de este tipo de revistas, se ha producido ese ajuste". En ese mismo sentido, el presidente de esa casa editorial, Luis Fernando Santos, manifestó que “estas decisiones no son fáciles, son decisiones de negocios”.

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sábado, 01 abril 2017

Contra la censura en Venezuela

Caracol Radio Colombia, La Asociación Nacional de Medios de Comunicación (ASOMEDIOS), La Asociación Colombiana de Editores de Medios Informativos (Andiarios) y la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), rechazamos de manera enfática las agresiones de las que fue víctima la periodista Elyangélica González, corresponsal en Venezuela de la cadena colombiana Caracol Radio. Este ataque no tiene precedentes recientes y contradice los principios democráticos.

A las 8:30 de la mañana del 31 de marzo de 2017, en inmediaciones del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela y haciendo cubrimiento de la crisis institucional a partir de la suspensión de la Asamblea Nacional, la periodista fue brutalmente golpeada por una decena de militares venezolanos que la despojaron de sus equipos periodísticos e interrumpieron la transmisión que hacía en directo para Bogotá.

“Me arrancaron el teléfono, traté de sacar el otro para seguir hablando, me lo quitaron, lo partieron, lo quemaron, me detuvieron en el Tribunal Supremo (…) estoy completamente arañada, golpeada (…) me cayeron a patadas diez personas, me batían de un lado a otro”, relató la periodista cuando pudo retomar contacto con la cadena radial.

Estos hechos no solo son humillantes, autoritarios, crueles e inhumanos contra una periodista mujer, sino que además constituyen una grave violación a la libertad de prensa que cuestiona las garantías para los corresponsales internacionales que cubren la difícil coyuntura que atraviesa Venezuela. Son acciones de censura previa, violencia contra la prensa y destrucción de material periodístico que están prohibidas por las declaraciones internacionales de Derechos Humanos suscritas por el Estado de Venezuela.  Este ataque a la prensa colombiana acreditada en Venezuela ya está en conocimiento de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

El sistemático desprecio de las autoridades venezolanas por la libertad de prensa restringe el derecho a la información y aumenta las condiciones de riesgo de los periodistas que trabajan en este país. A pesar del que el gobierno venezolano desconoce sus obligaciones de respeto a la prensa a partir de acciones autoritarias, nos corresponde  insistir en la exigencia de los valores democráticos.

La declaración de principios sobre libertad de expresión indica que la “intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada”.

Por lo anterior, hacemos un llamado especial a la Cancillería colombiana para que siga brindando apoyo a los periodistas que trabajan para medios colombianos en ese país, tomando en cuenta que el respeto por la libertad de prensa es un requisito imprescindible y prioritario en curso las relaciones internacionales.

Solicitamos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que, en su mandato de garantizar el derecho a la libertad de expresión y de prensa, active todos los mecanismos a su disposición que contribuyan a la protección de la periodista Elyangélica González.

Por último, convocamos al periodismo de las américas a sumar esfuerzos solidarios y de unión con el fin de mantener a la comunidad internacional informada sobre lo que sucede en Venezuela. 

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miércoles, 26 mayo 2010

La FLIP le solicita a la Registraduría Nacional respetar el trabajo de los periodistas en elecciones presidenciales

La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) le envió una carta al Registrador Nacional, Carlos Ariel Sánchez, para solicitarle a la Registraduría, que le haga un llamado a todos sus funcionarios a garantizar y respetar el oficio de los reporteros el próximo 30 de mayo, día de las elecciones presidenciales, tal y como lo exige la Constitución y la ley.

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