La Policía no tenía motivos para detener a los periodistas de La Patria

El martes 21 de marzo los reporteros se dirigieron al hospital de Aguadas para cubrir el traslado de las personas que resultaron heridas en un accidente de tránsito en la vía que comunica a Aguadas con Pacora. Cuando Monroy estaba tomando imágenes, el padre de uno de los afectados se le acercó y le dijo “No me tome fotos, no la autorizo”. La reportera le respondió que no se preocupara porque no tenía registros de su hijo.

El teniente de la Policía, Andrés Felipe Jiménez, intervino en la discusión y le solicitó a la reportera que le mostrara las fotos. Monroy se negó y el uniformado le pidió que se identificara. La periodista le mostró su carné de prensa y el oficial le respondió “muéstreme su cédula, a mí ese documento no me sirve… para mí usted es una civil” y le solicitó también la cédula de identidad a su compañero, Helmer González.

Luego de que los periodistas entregaran sus documentos, el teniente los trasladó a la estación de Policía de Aguadas. Allí estuvieron detenidos mientras Jiménez los presionaba para que firmaran un documento en el que se aseguraba que las acciones de la Policía buscaban proteger a los reporteros de las personas afectadas por el accidente de tránsito. Según Monroy, luego de aproximadamente dos horas, un coronel de la Policía ordenó la liberación.

La FLIP expresa su preocupación por la reincidencia en los ataques contra la prensa por parte de miembros de la Policía. Entre enero y marzo de 2017, la Fundación ha documentado siete agresiones por parte de los uniformados en los que hay recurrencia de agresiones físicas y detenciones ilegales.

La FLIP hace un llamado a la Policía Nacional para que se les inicie un proceso disciplinario a los uniformados responsables y se apliquen las sanciones correspondientes. La ausencia de resultados concretos representa un mensaje equivocado hacia los demás miembros de la Fuerza Pública para la prevención de futuras agresiones.