Quince años de impunidad en caso de la periodista Jineth Bedoya

La FLIP lamenta que a pesar de la relevancia pública del caso persistan los obstáculos judiciales que se han acentuado durante el año 2015.

Libertad y recaptura de un victimario

A finales del mes de mayo - solo unos días después de que se cumplieran 15 años del secuestro, tortura y violencia sexual contra la periodista Jineth Bedoya- la Fiscalía ordenó la libertad inmediata de uno de los victimarios. La decisión se tomó pasando por alto su confesión, el reconocimiento de la víctima y sin despejar si tenía asuntos pendientes con la justicia. Días después la fiscalía reversó la decisión, relevó a los funcionarios a cargo del caso y ordenó la recaptura de Alejandro Cárdenas Orozco alias “JJ”. El impacto de este episodio ha sido grave y constituye una revictimización:

“Veo que esta es la respuesta de la Fiscalía General de la Nación a 15 años de impunidad. Su inoperancia me golpea profundamente, pero no me quita fuerza para seguir buscando justicia”, señaló la periodista Jineth Bedoya.

Los aplazamientos del primer juicio.

El 27 de marzo de 2015 un juzgado especializado de Bogotá asumió el proceso contra Mario Jaimes Mejía alias “el panadero” como responsable de los delitos de secuestro, tortura y violencia sexual. El primer juicio, que debería ser un avance significativo, ha sido víctima de la espiral de impunidad del sistema judicial en Colombia. En el transcurso del año se han presentado tres aplazamientos y las diligencias solo podrán ser retomadas hasta el 14 de diciembre de 2015.

La libertad irregular de un victimario y la demora judicial incrementa el riesgo de la periodista, tanto en su integridad física como emocional.

Esperanza en la Justicia Interamericana

Desde el año 2011 cursa una demanda internacional contra el Estado colombiano ante la CIDH por los hechos perpetrados contra la periodista. Faltar constantemente a su deber de brindar justicia y la complicidad de agentes estatales con la comisión de los delitos es objeto de análisis de este organismo internacional. El caso ya fue admitido y se encuentra a la espera de respuesta del Gobierno Colombiano.

La FLIP espera que esta reunión formal de trabajo con la CIDH contribuya para que el Estado Colombiano cumpla cabalmente con su deber de protección y juzgamiento de acuerdo con lo establecido en las medidas cautelares en favor de Jineth Bedoya, se obligue a una adecuada estrategia investigativa y judicial, que contribuya a que se conozca la verdad y se sancione todas las personas responsables de estos hechos.