Periodista denuncia estigmatización en su contra por parte de ex Gobernador

Luego de ocho años fuera del país debido a las amenazas de muerte que recibió en la zona, a finales de julio de este año el periodista Dussán regresó temporalmente a Colombia para visitar a algunos familiares. Por esos mismos días, tuvo conocimiento de una carta abierta que Muñoz dirigió al entonces fiscal General de la Nación, Mario Iguarán Arana, en la que acusaba al periodista de participar en una conspiración contra él y otros políticos del departamento. 

Según el ex gobernador, Dussán estaría haciendo parte de un plan del ex congresista Luis Fernando Almario Rojas que busca encontrar falsos testigos que declaren contra Muñoz por el asesinato de varios miembros de la familia Turbay Cote, ocurrido el 29 de diciembre de 2007. Almario Rojas está siendo investigado y estuvo detenido por dicho homicidio. 

En la carta dirigida a Iguarán Arana, Muñoz asegura que el periodista Dussán sería uno de los falsos testigos.

En diálogo con la FLIP, el comunicador asegura que se trata de unas declaraciones “injuriosas que faltan a la verdad”, pues manifiesta que ni siquiera ha sido llamado por la Fiscalía para dar su versión de los hechos. Dussán declaró, además, que las imputaciones del ex Gobernador lo ponen en riesgo a él y su familia, teniendo en cuenta los oscuros antecedentes del caso. El periodista se refiere al asesinato del comunicador José Duviel Vásquez y al exilio de Omar García Garzón, ex compañeros suyos en la emisora ‘La Voz de la Selva’ en Florencia, Caquetá.

Antecedentes

Según información recolectada por la FLIP desde hace varios años, fueron cuatro los periodistas de ‘La Voz de la Selva’ asesinados durante los años 2000 y 2001. Los primeros casos se reportaron el 30 de noviembre y el 13 de diciembre de 2000, cuando fueron ultimados Guillermo León Agudelo Aguirre y Alfredo Abad López, respectivamente. Posteriormente, el 6 de julio de 2001, un sicario cegó la vida de José Duviel Vásquez, director de la emisora, y dejó herido a Omar García Garzón, periodista del mismo medio que acompañaba a Vásquez pero que alcanzó a huir del asesino. García abandonó el país un mes después tras sufrir otro intento de homicidio.

Fuentes de la FLIP en la zona declararon que el atentado contra Vásquez y García estuvo motivado por las continuas denuncias periodísticas que los comunicadores habían realizado sobre presuntas relaciones de Muñoz, en ese entonces Gobernador, con la guerrilla de las FARC. En varias oportunidades Muñoz había acusado públicamente a Vásquez de generarle problemas de seguridad por sus continuos “ataques” periodísticos.

Otras fuentes del Caquetá manifestaron a la FLIP que hay enfrentamientos políticos de vieja data entre Muñoz y varios de sus allegados - como Alirio Calderón Perdomo, ex alcalde de Puerto Rico (Caquetá) - y la familia Turbay Cote, propietaria de la emisora ‘La Voz de la Selva’.

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La FLIP considera que estos señalamientos y estigmatizaciones pueden convertirse en un obstáculo para que los periodistas ejerzan libremente el derecho fundamental a la libertad de expresión, así como puede ocasionarles inconvenientes de seguridad por parte de terceros. La FLIP hace un llamado al ex gobernador Adriano Muñoz para que cesen estas acusaciones contra el periodista.