Amenazas y hostigamientos contra periodista en Bogotá

En abril pasado, Jessurm comenzó a recibir llamadas amenazantes a su celular. Un individuo que se identificaba como ‘Angelito’ le recomendó que dejara de “meter la nariz donde no debía” o de lo contrario la iban a “quebrar”. Con una intermitencia de quince días las llamadas se repitieron en varias oportunidades.

Poco después, el 16 de agosto de este año, la periodista recibió en su casa familiar de Barranquilla una torta acompañada de una nota. En términos ofensivos le decían que su suerte dependía de su silencio: “Este es un dulse [sic] regalo para recordarte que no hay rincón donde te puedas esconder. De Barranquilla a Bogotá te vamos a perseguir”, dice un aparte de la carta. Y más adelante, en clara alusión a su labor periodística, remata: “Por su seguridad no escriva [sic] nada ni diga nada de lo que ya sabe. No es la primera vez que se lo decimos (...) sabemos donde vives y donde trabajas”.

La periodista, quien se desempeña en el área de entretenimiento y farándula de Noticias RCN, está escribiendo un libro sobre la desviación irregular de dos millones de dólares entregados al gobierno colombiano en desarrollo del Plan Colombia. En su momento, 60 policías fueron investigados por la Procuraduría por este hecho.

La FLIP rechaza las amenazas y hostigamientos contra Diva Jessurum, los cuales constituyen un atentado contra la libertad de prensa y el derecho fundamental a la libertad de expresión, ampliamente reconocidos por la Constitución y los tratados internacionales de derechos humanos. Por último, hace un llamado a la Fiscalía General de la Nación para que acelere la investigación de estas amenazas y establezca si están relacionadas con la investigación que viene adelantando la periodista.

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Todas las agresiones contra los derechos a la libertad de prensa y a la libertad de expresión constituyen violaciones de los derechos humanos. Agredir a un periodista en medio de un conflicto armado es una infracción al Derecho Internacional Humanitario.