Minutos después del asesinato, la FLIP recibió información malintencionada, por parte de gente muy cercana al señor Posso y que había sido de confianza para la fundación en otros momentos, indicando que él ejercía el periodismo. Con base en esta información la fundación publicó un comunicado identificándolo como colaborador de la emisora Morena Estéreo; posteriormente otros medios, descontextualizando el comunicado, incurrieron en el error de aseverar que un periodista colombiano había sido torturado y asesinado.
La FLIP considera que la muerte del señor Posso es un hecho lamentable y exhorta a las autoridades para que investiguen y sancionen a los responsables.