Balance mayo y junio: Detenciones ilegales se convierten en la fórmula ‘exitosa’ de censura previa
En este periodo las principales dificultades para los comunicadores fueron el cubrimiento electoral y las manifestaciones públicas, concretamente las celebradas el primero de mayo, Día Mundial del Trabajo, y los últimos días de un paro de distintos sectores de agricultores que se extendió a varias ciudades del país. Entre las principales agresiones es importante resaltar que hubo 6 agresiones,10 obstrucciones, 5 amenazas y 3 detenciones ilegales.
Es precisamente este último indicador el que más preocupa. Las detenciones ilegales fueron una constante durante las manifestaciones del año 2013 y en la mayoría de los casos es la Fuerza Pública quien detiene de manera ilegal y arbitraria a los periodistas.
El primero de mayo el periodista Esteban Vanegas, reportero gráfico de El Colombiano y Q’hubo, fue detenido por agentes de la Policía de Medellín, mientras cubría las marchas en las que participaban trabajadores y estudiantes en la capital antioqueña. De acuerdo con la información recogida por la FLIP, los periodistas se percataron de una emboscada que la Policía hizo a un grupo de estudiantes e hicieron el registro gráfico. Después, miembros de esa entidad se dirigieron a donde se encontraban los reporteros. Vanegas fue arrojado al piso y golpeado antes de ser conducido a la tanqueta del Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD) en la cual fue llevado hasta la Fiscalía.
Durante varias horas la Policía argumentó que la detención correspondía a una agresión previa por parte del camarógrafo y que tenían un video donde esto quedaba comprobado. Estas afirmaciones eran falsas y a Vanegas lo dejaron en libertad. La incoherencia del tratamiento de la información por parte de la Policía y el gobierno de Medellín llevaron a que el Comandante de la Policía Nacional, Rodolfo Palomino, ofreciera perdón a través de su cuenta de Twitter. A la fecha, cursa una investigación disciplinaria no resuelta contra los policías.
Por otra parte, en horas de la tarde del miércoles, 28 de mayo de 2014, Diana Pérez, periodista de Caracol Televisión en Medellín, y el camarógrafo que la acompañaba, fueron detenidos durante más de dos horas por un numeroso grupo de estudiantes de la institución Politécnico Jaime Isaza Cadavid. El vocero de los estudiantes argumentó que la retención se realizó con la intención de verificar las imágenes que habían captado sus cámaras al interior de la institución.
Los periodistas se encontraban cubriendo las protestas que empezaron en la sede central del Politécnico, después de que los estudiantes se enteraran sobre el aumento de las matrículas. A pesar de la intervención de la Personería de Medellín y la presión de distintos sectores, los estudiantes no regresaron el material periodístico. La FLIP no conoce si se identificaron a los responsables de estos hechos.
A estos dos casos se suma lo ocurrido el día sábado, 3 de mayo de 2014, en el marco de las protestas agrarias en el sur del país. Miller Torres corresponsal de Noticias RCN, fue retenido ilegalmente por dirigentes y manifestantes del paro a la altura de “Cinco Veredas” en la carretera entre Pitalito y Neiva. Los manifestantes argumentaron que el medio en el que trabaja Torres es gobiernista y no informa bien a la comunidad.
El comunicador estuvo retenido cerca de 4 horas y fue liberado después de la intermediación de la alcaldía de Pitalito, la Cruz Roja y colegas de la región.
La FLIP recuerda que los Relatores Especiales para la Libertad de Expresión de la ONU y la CIDH han recalcado la importancia de la labor que cumplen los periodistas que cubren las manifestaciones sociales, “el Estado debe otorgarles el máximo grado de garantías para que cumplan su función. Ese deber no se limita a otorgar medidas concretas de protección para los comunicadores. Incluye también la obligación de crear las condiciones necesarias para mitigar el riesgo del ejercicio de la profesión en esas situaciones”.
Este tipo de actuaciones se han convertido en los últimos dos años en una constante que es muy delicada, pues constituye censura previa y es una grave violación a la libertad de prensa en la medida en que el efecto final es el retiro del comunicador del escenario noticioso.
Attachments:
Published in Pronouncements
Tagged as Libertad de prensaPeriodistas en riesgoPeriodista amenazado
Temas de interés
Other pronouncements
Tuesday, 23 February 2010
Circula panfleto que amenaza a periodistas en Cartago, Valle del Cauca
Desde el pasado 21 de febrero de 2010, circula en la ciudad de Cartago, Valle del Cauca, al occidente del país, un comunicado en el que se amenaza de muerte a varios ciudadanos de este municipio, entre ellos cinco periodistas de la región. Desde marzo de 2009 han circulado en Cartago cuatro panfletos similares.
Thursday, 28 April 2005
Amenazado periodista en Ibagué
Ayer, 26 de abril de 2005, el periodista Gilberto Martínez Prado fue amenazado en Ibagué (Tolima), ciudad al sur de Colombia. Martínez, director del Noticiero de Colmundo Radio, llegó como todos los días a las 12:30 p.m. a la sede de la emisora. En su correspondencia encontró un sufragio que decía: "(…) Siga denunciando que así va muy bien, gran hijueputa, escúdese en ese micrófono que le da grandeza pero fresco malparido que en el cementerio todos terminan".
En las últimas semanasel periodista venía denunciando irregularidades en el manejo de los recursos de Comfenalco -una caja de compensación familiar- y cuestionando algunos manejos irregulares de un ex congresista del Tolima.
Las amenazas contra el periodista comenzaron en enero de 2003, luego de condenar en su noticiero radial el asesinato de Felix Martínez Ramírez, vicepresidente de la Red de Veedurías y compañero del periodista. Desde entonces, Gilberto Martínez ha sido víctima de llamadas y de sufragios en que reiteradamente lo acusan de "sapo (entrometido)" y lo conminan a que deje de hacer denuncias sobre corrupción.
Debido al reiterado número de amenazas, el caso de Gilberto Martínez fue presentado ante el Programa de Protección a Periodistas. En marzo de 2003, el estudio de riesgo del DAS -Departamento Administrativo de Seguridad- arrojó que había una amenaza latente contra el periodista. Como resultado del mismo, Martínez Prado en la actualidad cuenta con dos escoltas y un vehículo blindado. El 2 de septiembre de 2004 se hizo una nueva evaluación de riesgo y el resultado fue el mismo.
La FLIP rechaza las amenazas de las que viene siendo víctima el periodista Gilberto Martínez Prado y reitera la importancia de que todos los reporteros colombianos puedan desarrollar su labor sin ningún tipo de intimidación o presión. Así mismo, le solicitará al Estado que Martínez Prado continúe con su esquema de seguridad para que pueda seguir realizando sus denuncias periodísticas sin ningún temor.
Tuesday, 30 September 2014
Doce periodistas amenazados en los últimos siete días
La FLIP rechaza los hechos intimidantes de la última semana contra periodistas de distintas zonas del país. Dos panfletos y una amenaza contra dos reporteros elevan a 58 la cifra de periodistas amenazados en lo que va corrido del 2014.
La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) rechaza el panfleto conocido ayer, 29 de septiembre, en horas de la mañana, y que llegó al correo personal de los periodistas amenazados de Cali y Buenaventura, departamento del Valle del Cauca.