Según el testimonio de ‘Sarmiento’, la orden de ejecutar al comunicador surgió bajo el mando de ‘Pablo Sevillano’ en el ‘Bloque Libertadores del Sur’ debido a que Bedoya presuntamente “colaboraba con las FARC” y porque como periodista había entrevistado al comandante ‘Marcos’, líder de ese grupo guerrillero.
Actualmente, ‘Sarmiento’ se encuentra recluido en la Cárcel de Máxima Seguridad de Itagüí, mientras que ‘Pablo Sevillano’ lo hace en una cárcel de Tampa, Florida, luego de su extradición a los Estados Unidos en 2008.
Varios meses antes de su muerte, el periodista había venido denunciando amenazas de muerte en su contra. En varias oportunidades, desconocidos le habían hecho llamadas telefónicas y lo habían abordado en la calle asegurándole que “si se mete con nosotros lo vamos a hacer joder”. La tarde del 27 de abril de 2001 Bedoya fue acribillado cuando se bajaba de un bus de servicio público. A pocas cuadras del crimen, la Policía encontró una libreta de apuntes del periodista en la que había anotado los alias de varios paramilitares que le venían haciendo seguimientos. El comunicador tenía 54 años y era padre de tres hijas.
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La FLIP celebra los avances de esta investigación, en el marco del proceso de Justica y Paz, y espera que estas confesiones se traduzcan en condenas efectivas y definitivas.