Durante estos días de diligencia se recibió una decena de testimonios entre investigadores judiciales, periodistas, amigos y familiares de Orlando Sierra, quienes coincidieron en que el subdirector de La Patria ya había recibido amenazas y que lo escrito en sus columnas habría sido determinante para el crimen.
La FLIP valora los pasos que se han venido dando para encontrar a los implicados en este homicidio e insiste en que, por primera vez, la justicia colombiana está asignando responsabilidades desde los autores materiales hasta los intelectuales por el asesinato de un periodista, marcando un hito en la lucha contra la impunidad en el país.
Sin embargo, en un caso que lleva más de una década de investigación, la FLIP teme que con esta suspensión, el juicio se dilate. Además considera que es preocupante que sea durante la audiencia, y no antes, que la Fiscalía confirme la participación de testigos. No es consecuente que sea el ente acusador quien solicite la suspensión del juicio.
Por esta razón la FLIP hace un llamado respetuoso a las autoridades que intervienen en el caso, principalmente a la Fiscalía y a la Procuraduría, para que presten especial atención al desarrollo del juicio y velen porque no se prolongue de manera indefinida. A su vez solicita que se tomen las medidas de protección necesarias para garantizar la integridad de los testigos que ya participaron en las diligencias y de quienes estarán próximos a hacerlo.